Por Lola Paz Lozano*
Las 10 letras que contiene esta palabra son pasos y técnicas para evitar el desorden y facilitar el orden de tu casa o espacio que frecuentes. Traducido al español sería “optimización”.
Los orígenes de este método -y de la palabra en sí- vienen de los cimientos de la psicología positiva que reflexiona sobre aquello que le da valor a la vida y los factores que contribuyen para vivirla plena y sanamente.
La base del streamline está en la forma de organizar el hogar permitiendo no sentirse estresado e intranquilo, es por ello que el minimalismo es aplicable -y funcional- a este método, ya que consiste en concentrarse en lo esencial apartando lo superficial, deshaciéndote de objetos y/o cosas innecesarias.
El exceso de elementos no se percibe de inmediato, es el resultado de un proceso gradual que va agregando nuevos objetos al hogar. Por eso existe un principio básico que se puede aplicar para practicar el minimalismo: la suma de un artículo debe estar acompañada por la eliminación de otro, de este modo el proceso irá encontrando un equilibrio.

Como mencionaba anteriormente, cada una de las letras es un paso para organizar el hogar y mejorar la limpieza. Si lográs cumplir lo que manifiesta cada paso, probablemente encuentres la organización que deseás para tu espacio, a través del método STREAMLINE:
S: Siempre hay que volver a comenzar, es decir, rever cada rincón y limpiarlo en su totalidad.
T: Tesoro, o traspaso. Así es como se deben catalogar los objetos.
R: Razón de ser de cada objeto, por lo tanto, debemos encontrarle un argumento a cada uno, de no ser así hay que desecharlo.
E: En cada lugar hay una cosa porque todo tiene su propio espacio.
A: Apartar todo de las superficies para otorgarle un lugar a cada cosa.
M: Módulos y cajas para agrupar los objetos y quitarlos solamente para limpiar.
L: Límites a la hora de organizar y decorar, menos es más.
I: Intercambio, por cada nuevo objeto que ingrese a tu hogar, uno similar debe irse.
N: Nada de permisos, todo lo que se tenga que ir se irá.
E: El mantenimiento diario es fundamental, por eso es necesaria y esencial la limpieza diaria.
La ausencia de constancia en el mantenimiento de un hogar indudablemente llevará al caos y el desorden del mismo, por eso la organización es una tarea que se alimenta con el tiempo y la perseverancia.
Otro de los puntos claves que tiene el streamline es la perduración diaria, la cual permite abordar de una forma más sencilla aquellas cuestiones que requieren de más tiempo y esfuerzo cuando se van posponiendo a largo plazo.
Si bien el orden suele observarse desde una perspectiva global, es importante visualizarlo incluso desde lo particular. Tip: dar una revisión general de los distintos rincones de la casa para identificar las áreas a mejorar.
Cada espacio del hogar es único y sobre todo limitado, además se empequeñece aún más cuando empieza a llenarse con objetos innecesarios. Es positivo encontrar métodos que organicen y el streamline es uno de ellos.
*Lola Paz Lozano periodista, redactora, auxiliar de contenidos en Empatía Comunidad.