La venta en pesos y en cuotas resulta hoy una opción muy valorada por los inversores inmobiliarios.
El 2021 se proyecta como un año de recuperación para el sector inmobiliario. Los magros números de 2020 no pueden más que mejorar durante la post-pandemia.
Muchos nuevos emprendimientos, parados durante la cuarentena, se presentan hoy como importantes oportunidades de inversión. En ese contexto, las alternativas de financiamiento aparecen como una herramienta central a la hora de atraer compradores.
Consultamos a distintos empresarios del sector inmobiliario sobre su opinión respecto al financiamiento en pesos y cómo éste está impactando positivamente en la venta de lotes y proyectos a desarrollar.
Según Hernán Nucifora, CEO de Global Investments, “la principal ventaja de la financiación es la posibilidad de acceder a una vivienda pagando en pesos. Eso es lo que permite el peso, porque comprar en dólares con un tipo de cambio tan volátil sería muy difícil de pagar”.
Por otro lado, Ignacio Coria, presidente del Grupo Coria, opina por su parte que “la ventaja principal de la financiación es poder mudarte a tu casa propia, destinando los fondos que probablemente antes destinabas al pago de un alquiler, para pagar la cuota de tu propiedad”.
Para el caso de los lotes, Sergio De Francesco, director de M2 Spaces, sostiene que la financiación “permite reducir la exposición financiera de los propietarios, tanto para los que están buscando reservar un lote para construir en el futuro o como inversión, pero particularmente para aquellos que quieren lanzarse a construir de inmediato”.
Es notable la cantidad de oferta que existe hoy de emprendimientos inmobiliarios y lotes que ofrecen opciones de financiación muy atractivas.
Global Investments, por ejemplo, ofrecerá financiamiento a 120 meses en locaciones del norte del GBA como Vicente López y Tortugas. “Será un total de 500 unidades que cuentan con planos aprobados para iniciar las obras. Poseen grandes espacios verdes, muy buenos amenities, excelente accesibilidad y tienen todo lo que la mayoría de las personas va a querer buscar en la post-pandemia. Con respecto a los pagos, son 100 % en pesos y no están atados a ningún tipo de variable frente al dólar”, señala su CEO.
En el caso de Grupo Coria, su presidente señala que “en la mayoría de nuestros proyectos ofrecemos financiación. La mejor opción actualmente es Cañada Village 3, a la que se puede ingresar con el 20% del valor de la unidad, pagar el 30% adicional durante la obra y el 50% restante en cuotas en pesos ajustadas por el índice CAC en hasta 10 años. Si se paga al contado se accede incluso a mejores oportunidades de inversión”.
Por el lado de M2 Spaces, De Francesco apunta que “en dos de nuestros emprendimientos, blü en Pilar y Pinares en Capilla del Señor, ofrecemos alternativas de contado y con variantes financiadas, en dólares y en pesos ajustados por índice de la construcción CAC. En el caso de blü, se trata de cuotas de adhesión al fideicomiso, mientras que en Pinares son cuotas tradicionales hasta la posesión del terreno”.
Otro de los beneficios que suelen ofrecer las empresas comercializadoras es un descuento si el pago se realiza en efectivo. “En un proyecto en pesos, el hecho de que se pague de contado no es un beneficio. De hecho, dependiendo de la reputación del desarrollador, el proyecto y demás, en muchos de los casos yo no aconsejo que se pague de contado, ya que se va apreciando la obra a medida que va avanzando y los desembolsos están atados de acuerdo al avance”, asegura Nucifora.
Sobre este punto, Nucifora apunta que “un proyecto que se pagaba en 24 meses, el inversor al mes 23 prácticamente había cancelado el 100% y vendía la unidad para obtener una rentabilidad sobre el capital invertido. Hoy, en nuestro caso, va a tener un % muy bajo del total de la unidad al momento de la entrega, por ende, la rentabilidad va a ser mucho más fácil de llevarse a cabo. Además, va a poder trasladar la financiación a varios años más, lo que le va a permitir tener un mercado mucho más amplio de quien va a ser el comprador final”.
Para Coria, la financiación sirve también para los inversores “porque la propiedad que compran la alquilan y con el monto que les genera el alquiler van pagando la cuota. Así, logran capitalizarse con poco capital inicial”.
Finalmente, De Francesco agrega que “la reducción de exposición financiera definitivamente es muy útil también para aquellos inversores que tengan flujos de dinero recurrentes y no montos acumulados para inversión. La financiación permite blindar esos montos futuros en un valor tierra ya comprometido”.