Por Vanesa Armesto*
En un mercado tan cambiante y lleno de incertidumbre, la necesidad de generar lazos entre los profesionales se vuelve cada vez más prioritario. Hoy, contar con un mercado colaborativo es esencial.
¿Qué es ser inmobiliario? Si buscamos encontramos este significado: “Es toda persona que, en forma normal, habitual y onerosa, intermedia entre la oferta y la demanda, en negocios inmobiliarios ajenos, de administración o disposición, participando en ellos mediante la realización de hechos o actos que tienen por objeto conseguir su materialización.” Esta es la definición técnica o mejor dicho teórica. En la práctica, ser un profesional inmobiliario es además de una gran responsabilidad, una gran pasión, un estilo de vida.
Se trata nada más y nada menos de la intervención en la decisión más importante de la vida de una persona, materialmente hablando, ya que muchas veces presenciamos el acceso a su primer hogar. En otros casos, el asesoramiento adecuado para la inversión de su renta a futuro.
Intermediar entre personas que tienen dos necesidades diferentes, que se complementan y convergen en un mismo objetivo, es lograr una transacción segura y satisfactoria.
Con la pandemia, la actividad inmobiliaria fue una de las más afectadas. Esto obligó a los inmobiliarios a reinventarse para acompañar el cambio social que se presentaba.
En esta nueva era, la singularidad del inmobiliario debía desaparecer. Se enfatizó la necesidad de generar sinergia entre los profesionales inmobiliarios. Armar estrategias, apoyarnos; así nació el espíritu colaborativo dentro del sector.
Se instaló la cultura colaborativa para que, unidos en una misma intención, poder sobrellevar el difícil momento que atravesaba y actualmente atraviesa el sector, y darle más fuerza a nuestra voz, y así generar medidas en beneficio del mercado.
Ser una comunidad colaborativa dentro del mercado se transformó en el estilo del inmobiliario actual, en donde las redes ocupan un lugar primario para poder de esa manera interactuar con nuestros colegas.
El gran reto para el sector inmobiliario fue repensarnos y activarnos en medio del escenario adverso; para esto tuvimos que incorporar los cambios que promueve la cultura colaborativa, que se apoya fundamentalmente en el uso de la tecnología y las redes sociales, algo que hasta la llegada de la pandemia venía bastante retrasado entre nosotros.
Lo que vivimos en la exposición y el congreso en el Hilton la semana pasada, fue eso, volver a encontrarnos pero desde una nueva configuración, “ya somos una comunidad de real estate a nivel nacional y latinoamericano”, porque todos los actores pudimos relacionarnos con un objetivo común que es hacer crecer el mercado en oportunidades y generar sinergia para el crecimiento.

*Vanesa Armesto: Editora periodística de Real Estate Data. Periodista y Corredora inmobiliaria matriculada de Cucicba. Matrícula 1413. Con una trayectoria de 20 años en el mercado inmobiliario. vanesa@realestatedata.com.ar