La termoarcilla va tomando relevancia como una alternativa sustentable y con numerosos beneficios para la construcción.
Primero en Alemania, y ahora en toda Europa, la termoarcilla va ganando adeptos entre los arquitectos, ya que se puede usar como revestimiento en cocinas y baños o levantar muros.
¿Qué es la termoarcilla? Se trata de un bloque cerámico de muy baja densidad y de mayor grosor que el ladrillo convencional. Su acabado es rústico muy atractivo y es muy resistente. Esta hecho con una mezcla de arcilla con polietileno expansivo, y otros aditivos que hace que el material sea poroso. Una alternativa ecológica para la construcción de inmuebles.
Según los especialistas, la termoarcilla tiene una doble función, es un material técnicamente muy práctico para su uso y estéticamente queda muy bien, sin necesidad de agregarle otro recurso.
Es ideal para realizar muros traslucidos y también para revestir pisos y paredes. Tiene muy buen aislamiento térmico y una elevada resistencia al fuego, en casos de incendio y esto que permite gastar menos energía transformándolo en un material sostenible, esta característica le otorga además un aislamiento acústico mayor al inmueble.
Además permite realizar obra en forma muy rápida, ya que es de muy fácil ejecución, con una gran plasticidad, generando diferentes tramas y formas. La termoarcilla se adapta muy bien a espacios exteriores ya que es muy funcional, y gracias a su acabado se transformó también en un material para decoración muy práctico, y tiene un importante grado de impermeabilidad al agua de lluvia.
Los arquitectos del estudio PICarchitecs_Pich-aguilera y 2BMFG, envolvieron el centro de Investigación del Hospital de la santa Creu i Sant Pau, en la ciudad de Barcelona, con este noble y novedoso material que cada día gana más seguidores.
Este material por todas sus características y posibles usos, poco a poco se va convirtiendo en uno de los mejores aliados de los arquitectos para concebir edificios sostenibles, eficientes energéticamente y confortables.