*Por Lola Paz Lozano
Con el paso del tiempo, todos vamos a envejecer; a medida que eso sucede se va perdiendo determinada autonomía y se tiene mayor dificultad para moverse y realizar tareas cotidianas.
La vivienda es esencial para la seguridad y el bienestar de todas las personas; en el caso de las personas mayores es necesario adaptarla para garantizar la máxima seguridad y comodidad en función de las necesidades de la vejez.
Una vivienda amigable es fundamental para la seguridad y el bienestar de las personas mayores y en situación de dependencia. El envejecimiento y la urbanización de la población son dos tendencias globales que caracterizan el siglo XXI. Una de las claves para mejorar la calidad de vida de las personas a medida que envejecen es la vivienda en la que residen.
Es importante anticiparse e ir mejorando la seguridad y confort del hogar de nuestros seres queridos longevos, no es necesario esperar a que sean demasiado mayores o sufran algún tipo de discapacidad.

Consejos básicos para una vivienda cómoda y segura para adultos mayores:
- Eliminar los obstáculos que dificulten el paso y la movilidad, como por ejemplo macetas, mesitas poco estables, alfombras, etc.
- Las habitaciones deben estar perfectamente iluminadas para facilitar una buena visión y evitar el riesgo de caídas.
- Ponerle atención a las alfombras, lo importante es que sean antideslizantes de goma, caso contrario lo más recomendable es retirarlas para evitar tropiezos o caídas.
- Algo fundamental es que deben de tener acceso al teléfono de forma permanente.
También es importante destacar que adaptar el hogar de una persona mayor no es modificarlo hasta convertirlo en algo ajeno, es fundamental que sigan sintiendo la sensación de estar en su casa.
¿Cómo amoldar y preparar el hogar para una persona mayor en los principales espacios de la casa como lo son el baño, la cocina y el dormitorio?
Primordialmente adaptando el baño -el 46% de las caídas en adultos mayores suceden aquí- a las necesidades de la persona. Por ejemplo, instalando barras de apoyo, un asiento de ducha, entre otros.
La cocina es otro espacio en el que hay riesgos de caer o sufrir una lesión. Para evitar accidentes, es necesario hacer algunos ajustes como colocar en la cocina y armarios puertas correderas, ya que son menos peligrosas y reducen el riesgo de golpes y lesiones. Para cocinar es preferible instalar placas de inducción, con indicador del grado de calor, para evitar quemaduras y fugas de gas.
El dormitorio es muy importante para facilitar el cuidado. En algunas ocasiones está en una segunda planta dentro de la casa. Por eso, si es posible, se recomienda colocarlo en la planta baja para limitar los esfuerzos al acostarse y levantarse e incluso subir y bajar escaleras. También se recomienda que esté ubicado estratégicamente cerca del baño.
Si bien la vejez es una instancia más de la vida, también es una de las más críticas: en donde se necesita el doble de atención y cuidado. Por esto -y otros factores- es importante adaptar la vivienda correctamente.
*Lola Paz Lozano periodista, redactora, auxiliar de contenidos en Empatía Comunidad.