Por Vanesa Armesto*
El mundo entero está pendiente de lo que ocurre en el conflicto entre Rusia y Ucrania. En Argentina, desde lo emocional hasta lo económico podría verse afectado.
La invasión rusa en Ucrania tiene al mundo entero en alerta. El repudio es generalizado ante las actitudes bélicas de Rusia. Además de las implicancias morales y emocionales que una guerra provoca, también, aunque no menos importante, son las secuelas a nivel económico que puede aparejar.
En la medida en que el conflicto siga avanzando, el resto del mundo le impondrá sanciones a Rusia, dejándola casi aislada política y económicamente del resto.
Esta situación va a provocar efectos negativos de diferente magnitud en todos los países en general. En lo que refiere a Argentina, estas sanciones que ya se fueron aplicando a Rusia afectan directamente en la economía, que está intentando alguna recuperación luego de la pandemia.
Esta guerra llega poco tiempo después de que el presidente argentino Alberto Fernández comenzó a entablar relaciones con Rusia con el fin de lograr una mayor integración económica. El escenario actual cambió, y hoy estas sanciones que le impusieron a Rusia marcan un precedente, y ponen a la Argentina en una situación complicada, debiendo cambiar de rumbo en busca de posibles “socios” económicos que ayuden en la recuperación económica.
El mundo entero está inundado de incertidumbre, y mucho más Argentina, que está intentando salir del pozo en que se encuentra y comenzar a recuperarse luego de la pandemia, y en medio de un cierre de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional que se dilata más de lo esperado.
Esta demora en lograr un crecimiento económico, va seguir afectando en forma directa al sector inmobiliario que continúa en espera.

*Vanesa Armesto: Editora periodística de Real Estate Data. Periodista y Corredora inmobiliaria matriculada de Cucicba. Matrícula 1413. Con una trayectoria de 20 años en el mercado inmobiliario. vanesa@realestatedata.com.ar