Por Valentina Larrea*
A partir de la pandemia, muchos argentinos han decidido migrar hacia espacios más amplios y huir de las aglomeraciones urbanas. Una vida sostenible y un entorno más natural dan como resultado mejoras en la calidad de vida, ¿cuánto cuesta este cambio radical?
La implementación del homeoffice facilitó la posibilidad de alejarse de los espacios de trabajo convencionales y escapar de un ritmo de vida agobiante y rutinario. La meta de muchos, en el período post covid, está puesta en buscar alternativas por fuera de la ciudad, habitando espacios verdes, menos poblados y abriendo el camino a modelos de vida con consumos más responsables y prácticas más conscientes.
“Si bien la elección de vivir en barrios cerrados es algo que viene creciendo en Argentina desde que se hicieron las autopistas, la pandemia aceleró los procesos de migración al suburbano por varios factores: baja del costo de la construcción por las diferentes devaluaciones, la posibilidad de trabajar remotamente, y el efecto ´YOLO´ (You Only Live Once), que le permite a las familias llevar un ritmo de disfrute en relación a la forma y el lugar en dónde eligen vivir y trabajar”, comentó Esteban Edelstein Pernice, director de Castex propiedades.
Sin dudas, la experiencia ha demostrado que, en muchos casos, las personas son más productivas e incurren en menos costos de traslado y uso de tiempos de viaje sin sentido. Aquel segmento de la población que no necesita habitar espacios cercanos a su actividad laboral busca los mejores lugares para vivir, con seguridad privada, naturaleza, equipamiento y viviendas de mayor metraje.
“En términos de costos, hoy tenemos que calcular que un lote en un barrio aceptable no baja de los 70 mil dólares, sumado a los costos de gestiones de planos, proyecto y la obra. Son alrededor de entre 800 y 1000 dólares por cada metro cuadrado de la casa que uno piense desarrollar”, aseguró German Gomez Picasso, fundador de Reporte Inmobiliario.



Las familias eligen mudarse al suburbano porque obtienen muchos más metros por el mismo precio, seguridad, amenities, terreno propio y una vida en comunidad. En general, esta tendencia se ve reflejada en gente de buen poder adquisitivo, profesionales más independientes o empresarios, mayoritariamente jóvenes.
“Hay unidades en los barrios privados y countries que tienen valores similares a los departamentos de la ciudad e inclusive menores. San Isidro es otra de las zonas con más oferta de emprendimientos, como el caso de Palmera Campus, que por precios muy competitivos permiten acceder a una unidad en un complejo amplio, verde, con amenities y balcones o terrazas de grandes dimensiones. En este caso, hay unidades en pozo desde 1300 usd el m2”, sostuvo Mariano Gubitosi, Gerente Comercial de Grupo Portland.
En cuanto a lo que es la oferta geográfica, según el último informe arrojado por la Agencia de Recaudación Provincia de Buenos Aires (ARBA) en 2020, había un total de 1000 countries distribuidos por todo el territorio bonaerense. “Hay zonas para todos los gustos, ya sea norte, sur u oeste. Existe una gran dispersión de precios según la zona y el barrio que uno elige. La oferta de lotes actualmente va desde 30.000 usd hasta 1 millón de usd o más”, afirmó Gomez Picasso.
Sin embargo, existen zonas más alejadas dentro de la provincia, que están en crecimiento poblacional constante, como el Partido de la Costa o Pinamar, donde ya existe una infraestructura que se usa poco tiempo al año pero de a poco se va consolidando la tendencia de uso permanente. En este contexto, Grupo Portland junto a Solanas están desarrollando el proyecto Solanas Mar Azul, que si bien apunta a un público vacacional, ofrece una opción excelente para quienes deciden mudarse un poco más lejos y disfrutar de la naturaleza, bosque y mar con todos los servicios durante el año.
*Valentina Larrea: periodista, redactora y auxiliar de prensa en Empatía Comunidad.